La guerra civil española (1936 – 1939)

La rebelión comenzó en el protectorado español de Marruecos como un golpe de estado el día 17 de julio de 1936 y el día 18 se extendió por la península. Pero el golpe de estado no triunfó en todas las provincias. Los sublevados controlaron Galicia, Castilla, León, parte de Aragón, algunas ciudades de Andalucía (Sevilla, Córdoba y Granada), Baleares, Canarias y el protectorado de Marruecos. Fracasó en Madrid y Barcelona, donde las autoridades entregaron armas a los sindicatos obreros. En otras capitales, los jefes militares fueron fieles a la República y mantuvieron el control del ejército.

El golpe, por tanto, no triunfó totalmente, pero el gobierno tampoco era dueño de la situación en todo el país. Ello conducía a una guerra civil, porque en el alzamiento de 1936 también participo la población civil.

España se dividió en dos territorios:

1) El territorio republicano (del gobierno), tenía  los núcleos industriales y urbanos de más importancia: Cataluña, Valencia y el País Vasco. Las minas del norte y el oro del Banco de España. La República conservó también la flota, la aviación y la mitad del ejército. Además, las masas obreras armadas (los milicianos) se unieron al ejército republicano, pero faltaban mandos y disciplina. Por fuerza militar y recursos tenía ventaja respecto a los sublevados pero les faltaba disciplina y unión militar (que sí había en el bando liderado por Franco)

2) El bando sublevado controlaba un territorio menor que el del gobierno, sin centros industriales importantes, pero se quedó con la principal zona cerealista. Militarmente, contaban con la mayoría de los oficiales y la mitad del ejército. A ellos se unió el ejército de África, que disponía de unos 47.000 soldados. Este ejército se amplió con tropas procedentes de las organizaciones políticas (FE y de la JONS, los monárquicos y los carlistas).

 1. Repercusión internacional        

La guerra civil tuvo una gran repercusión internacional y fue, en cierto modo, el anticipo de la Segunda Guerra Mundial.

Francia e Inglaterra adoptaron una política de neutralidad y crearon un Comité de No Intervención, al que se unieron hasta 27 países. Pero la realidad fue que Italia, Alemania, Portugal y la URSS, a pesar de su adhesión a dicho comité, enviaron ayuda a alguno de los dos bandos: Italia y Alemania apoyaron a las tropas franquistas de manera muy decidida (aproximadamente 80.000 soldados italianos durante toda la contienda y la decisiva aviación alemana); la URSS y milicianos voluntarios de diferentes países (EEUU, Francia, etc.) ayudaron a la República. 

2.  La evolución del conflicto

 Fracasado el golpe militar a finales de julio de 1936, los sublevados llevaron el peso y la iniciativa en las ofensivas militares. La guerra puede dividirse en las siguientes fases:

 A) Los primeros combates y la batalla de Madrid ( Julio 1936-Marzo 1937)

Los sublevados se dirigieron hacia Madrid con la intención de finalizar rápido con la guerra. Sin embargo y no pudieron ocupar la capital al encontrarse con la eficaz resistencia de las milicias populares y la Brigadas Internacionales.

B) La guerra en el Norte (abril 1937-noviembre 1937)

Ante la imposibilidad de ocupar Madrid, Franco, que ya dirigía las fuerzas sublevadas, decidió intensificar las operaciones en la zona norte, donde había importantes industrias y que ya se encontraba aislada del resto de la España republicana. Esta zona fue ocupada en noviembre de 1937.

C) El avance hacia el Mediterráneo (diciembre 1937-noviembre 1938)

A continuación, reforzados por el control de las industrias metalúrgicas del norte, las tropas

nacionalistas avanzaron hacia el Mediterráneo, para aislar a Cataluña y separar  Madrid del mar. El ejército republicano intentó evitar este avance con una gran ofensiva en el río Ebro. La batalla del Ebro fue la más importante y sangrienta de la guerra, duro tres meses, murieron unos 100.000 soldados y terminó con la victoria de las tropas franquistas. El ejército republicano terminó destruido casi completamente. El fin de la guerra ya era cuestión de tiempo.

D) El fin de la guerra (diciembre 1938- abril 1939)

Con la ocupación de Cataluña y, por último, de las zonas de Valencia y Madrid, se puso fin  la guerra. El 28 de marzo de 1939 las tropas rebeldes entraron en Madrid y el 1 de abril Franco anunció oficialmente que la guerra había terminado.

3. Consecuencias de la Guerra Civil

La guerra causó muchas pérdidas humanas y materiales, además de dejar un país traumatizado y en ruinas. Estas fueron sus principales consecuencias:

  • Consecuencias demográficas. Aproximadamente hubo medio millón de muertos. Esta cifra incluye a los que murieron en los combates y bombardeos y a las víctimas de las represalias políticas practicadas en ambas zonas. A estas pérdidas hay que agregar las 400.000 personas que se exiliaron durante y después de la guerra.
  • Consecuencias económicas. La guerra incidió gravemente en la economía española:

1) La fuerte disminución de la población activa

2) La utilización de las reservas estatales de oro por la República para financiar la guerra

3) Los elevados gastos militares de ambos ejércitos

4) La destrucción de un gran número de edificios y de medios de transporte provocaron el colapso y el retroceso económico.

  • Consecuencias políticas. En el orden político, la gran consecuencia de la Guerra Civil fue la desaparición de la República y la implantación de una dictadura que duraría hasta 1975.

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